1985

Extraña relación

Extraña relación

Tempestades con mucho viento, desgarrador de vestiduras, me tiendo al desnudo sobre un fardo de hojas empolilladas, arañando mi piel. Mi busto sangra y se despedaza el pezón izquierdo. Y tú con tu mirada lasciva, te limpias los hilos de sangre que hay en tu cara. Un beso en el aire se apodera del instante, mientras yo sumergida en el éxtasis del amor, circundo con mis ojos lo extraño de nuestra relación.

Tu siempre allí, mirándome, inquietas mi sentir y caigo tendida en tus brazos, se hunden en mi cuerpo las espinas de tu ser, una a una se apoderan de mi cuerpo hecho papel. Papel de regalo con colores inconstantes, variantes, de alas esquivas. Tú me envuelves y te colocas encima de mí. Espero tus caricias, tus besos y la entrega. El viaje a un horizonte perdido, con luces intermitentes, blancas, me agarras las manos, mi vientre se desplaza a un lugar tranquilo, el lugar de los estados imprevistos y finalmente, el beso en la boca.

Te acercas con la mirada perdida, poco a poco, tu aliento me inquieta, tus manos me aprietan la cara, nuestros labios se humedecen y allí acaba todo, hasta el día siguiente que te veo ausente del ambiente, como si no hubiera pasado nada entre nosotras. Tu tan igual que yo, no me abandonas, te sientas en la misma silla, agarras el lápiz que yo agarro y escribes a mi lado. Te ríes de los escritos y te vas con tu gesto burlón. Regresas y eres igual que siempre, con tu deseo de pertenecerme de nuevo y desgarrarme.

Una relación de dos. Te sientas a mi lado y frente al espejo la misma imagen, acaricias mi cuerpo y es igual al tuyo, la misma textura, la misma forma, el mismo color. Desde niñas hemos estado juntas y cada instante descubro tu presencia, tu cuerpo es el mío y el mío tuyo. Tus pasos pisan los míos, los arrastras a un camino indefinido, solitario. Después de aquella desesperación, aquella pertenencia, las manos apretando la almohada, los movimientos, el éxtasis, me doy cuenta de que tú no llenas los momentos, solo eres un cuadro al lado de una guitarra tocando para mí.